Introducción de La siesta inolvidable 2007

Introducción original
Introducción especial de Carlos Barragán

martes, 1 de enero de 2008

Los portadores de sueños

Este texto enviado por Julia de Punta Lara me pareció adecuado para este momento. Espero que lo disfruten.

Los portadores de sueños

En todas las profecías
está escrita la destrucción del mundo.
Todas las profecías cuentan
que el hombre creará su propia destrucción.

Pero los siglos y la vida
que siempre se renueva
engendraron también una generación
de amadores y soñadores,
hombres y mujeres que no soñaron
con la destrucción del mundo,
sino con la construcción del mundo
de las mariposas y los ruiseñores.

Desde pequeños venían marcados por el amor.
Detrás de su apariencia cotidiana
guardaban la ternura y el sol de medianoche.
Las madres los encontraban llorando
por un pájaro muerto
y más tarde también los encontraron a muchos
muertos como pájaros.
Estos seres cohabitaron con mujeres traslúcidas
y las dejaron preñadas de miel y de hijos verdecidos
por un invierno de caricias.
Así fue como proliferaron en el mundo
los portadores de sueños,
atacados ferozmente por los portadores de profecías
habladoras de catástrofes.

Los llamaron ilusos, románticos, pensadores de utopías,
dijeron que sus palabras eran viejas
y, en efecto, lo eran porque la memoria del paraíso
es antigua en el corazón del hombre.

Los acumuladores de riquezas les temían,
lanzaban sus ejércitos contra ellos,
pero los portadores de sueños
todas las noches hacían el amor
y seguía brotando su semilla del vientre de ellas
que no sólo portaban sueños
sino que los multiplicaban
y los hacían correr y hablar.
De esta forma el mundo engendró de nuevo su vida
como también habia engendrado
a los que inventaron la manera
de apagar el sol.
Los portadores de sueños sobrevivieron
a los climas gélidos,
pero en los climas cálidos
casi parecían brotar por generación espontánea.

Quizá las palmeras, los cielos azules,
las lluvias torrenciales
tuvieron algo que ver con esto.

La verdad es que como laboriosas hormiguitas
estos especímenes no dejaban de soñar
y de construir hermosos mundos,
mundos de hermanos, de hombres y mujeres
que se llamaban compañeros,
que se enseñaban unos a otros a leer,
se consolaban en las muertes,
se curaban y cuidaban entre ellos,
se querían, se ayudaban
en el arte de querer
y en la defensa de la felicidad.

Eran felices en su mundo de azúcar y de viento,
de todas partes venían a impregnarse de su aliento,
de sus claras miradas.

Hacia todas partes salían
los que habían conocido,
portando sueños,
soñando con profecías nuevas
que hablaban de tiempos de mariposas y ruiseñores
y de que el mundo no tendría que terminar
en la hecatombe.

Por el contrario, los científicos diseñarían
puentes, jardines, juguetes sorprendentes
para hacer más gozosa la felicidad del hombre.
Son peligrosos - imprimían las grandes rotativas.
Son peligrosos - decían los presidentes en sus discursos.

Son peligrosos - murmuraban los artífices de la guerra.
Hay que destruirlos - imprimían las grandes rotativas.
Hay que destruirlos - decían los presidentes en sus discursos.
Hay que destruirlos - murmuraban los artífices de la guerra.
Los portadores de sueños conocían su poder,
por eso no se extrañaban.

También sabían que la vida los había engendrado
para protegerse de la muerte que anuncian las profecías
y por eso defendían su vida aún con la muerte.

Por eso cultivaban jardines de sueños
y los exportaban con grandes lazos de colores.

Los profetas de la oscuridad se pasaban noches
y días enteros
vigilando los pasajes y los caminos
buscando estos peligrosos cargamentos
que nunca lograban atrapar
porque el que no tiene ojos para soñar
no ve los sueños ni de día, ni de noche.

Y en el mundo se ha desatado un gran tráfico de sueños
que no pueden detener los traficantes de la muerte;
por doquier hay paquetes con grandes lazos
que sólo esta nueva raza de hombres puede ver
la semilla de estos sueños no se puede detectar
porque va envuelta en rojos corazones
en amplios vestidos de maternidad
donde piesecitos soñadores alborotan los vientres
que los albergan.

Dicen que la tierra después de parirlos
desencadenó un cielo de arcoiris
y sopló de fecundidad las raíces de los árboles.
Nosotros sólo sabemos que los hemos visto,
sabemos que la vida los engendró
para protegerse de la muerte
que anuncian las profecías.

Gioconda Belli

5 comentarios:

  1. Hola Siesteros,

    Buen comienzo de año. Abriguemos la esperanza que la Siesta volverá al eter. Mientras tanto, mantengamos vivo su espíritu, que evidentemente ya trascendió un horario y una radio... alguien dijo ayer que pasaban a ser leyenda. Y es verdad.
    Lo vamos a comprobar cuando en un par de horas, anhelemos el mensaje irrefutable del grillo antes del ramplonismo costumbrista y "demagogo" que vendrá.

    Gracias Julia por acercarnos estas palabras.
    Mariana, de Paraná

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  2. Muy lindo, gracias.
    Feliz año para todos!

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  3. hola siesteros que dia el de ayer ,INOLVIDABLE,que lindo fue juntarnos y compartir el aguante,pese al gran calor...
    Bueno hemos comenzaso el año poeticamente ,un gran abrazo
    cristina-0livos(cris45)

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  4. Cristina, alguien saco fotos que puedan subir aca?

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  5. .
    Siesteros queridos, si alguno sacó fotos por favor que las comparta y sobre todo cuenten que sucedió.

    Yo estuve con ustedes en espíritu, pues resido en Suiza y muero por ver y saber que pasó.

    Muchas gracias.

    Cristina
    .

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